Los implantes penianos son dispositivos colocados dentro del pene para permitir que los hombres con disfunción eréctil (DE) logren una erección. Los implantes penianos generalmente se recomiendan cuando otros tratamientos para la DE fracasan.

La colocación de los implantes penianos requiere cirugía.

Hay dos tipos principales de implantes penianos, semirrígidos e inflables. Cada tipo de implante peniano funciona de manera diferente y tiene diversos pros y contras. Al elegir un tipo de implante peniano, considere sus preferencias personales y su historial médico. Su proveedor de atención médica podría sugerir un tipo de diseño sobre otro en función de su edad, riesgo de infección y condiciones de salud, lesiones o tratamientos médicos que haya tenido.

Prótesis maleables
Las prótesis maleables o semirrígidas son más fáciles de usar; el pene permanece rígido y se puede dirigir hacia arriba y hacia adelante con la mano durante la actividad sexual, y hacia abajo o hacia los lados cuando no se desea tener relaciones sexuales. Estos dispositivos pueden causar ciertas incomodidades, como cuando se usa traje de baño o se practica deporte.

Prótesis inflables
Estas prótesis tienen varios componentes. Hay un reservorio de líquido estéril que se coloca detrás del pubis, y una válvula que se coloca en el escroto (junto al testículo). Cuando se presiona la válvula en una dirección, el líquido viaja a los dispositivos ubicados dentro del pene, lo que resulta en una erección. Al presionar la válvula en la dirección opuesta, el líquido regresa al reservorio y el pene vuelve a estar flácido. En cualquiera de los tipos de prótesis, la cirugía es relativamente indolora. Los implantes se colocan dentro de los cuerpos cavernosos a través de una pequeña incisión en el escroto y/o encima del pubis. La anestesia puede ser general, regional o incluso local en algunos casos. En cualquier caso, se considera una cirugía de bajo riesgo que proporciona un alto grado de satisfacción para quienes utilizan estos dispositivos y sus parejas. La cirugía es ambulatoria. El paciente sale de la cirugía con un catéter urinario que se retira antes de la primera semana después de la operación, y puede comenzar a tener actividad sexual seis semanas después de la cirugía.

Complicaciones
La principal complicación es la infección, que puede ocurrir en el 6% de los pacientes operados. Para prevenir la infección, el paciente recibe antibióticos antes de la cirugía y continúa tomándolos durante algunos días después. Si hay una infección, generalmente es necesario retirar el implante. La infección es más común en pacientes diabéticos, por lo que requerirán cuidados especiales. El rechazo del cuerpo a la prótesis y la erosión del material implantado fuera del cuerpo ocurren en menos del 3% de los pacientes. Eventualmente, el mecanismo de funcionamiento de las prótesis inflables puede fallar, lo que requeriría reemplazar la parte que no funciona o cambiar toda la prótesis (esto ocurre en menos del 1% de los pacientes). El principal problema de las prótesis es su costo, que tiende a ser alto.

Si bien los implantes penianos permiten a los hombres lograr una erección, no aumentan el deseo sexual ni la sensación. Los implantes penianos tampoco hacen que el pene sea más grande de lo que es en el momento de la cirugía.

En promedio, los implantes penianos duran 20 años. Cuando el implante se desgasta, deja de funcionar. Su cirujano puede revisarlo, generalmente reemplazándolo con un nuevo implante.

Referencias:
– Libro: “No le tenga miedo al dedo: Todo lo que un hombre debe saber sobre su próstata” Autores: Dr. René Sotelo, Dr. Juan Arriaga, Dr. Inderbir S. Gill. Editorial: VINMA, C.A; 2nd edición 
– https://www.mayoclinic.org/tests-procedures/penile-implants/about/pac-20384916
– https://my.clevelandclinic.org/health/treatments/10054-surgical-penile-implants